Sin título

Mis versos son de un color duro,
como mi voz
y quizas la suspicacia de mi razón
lo juro.

Mi energía es tan fuerte,
pero a la vez muy debil,
pues sabes como manipular,
mis sentidos
dejarlos sin hablar,
a tus deseos y tu manera de poderlos cambiar,
volteando una vez,
quiñandome el ojo tal vez...

Diciendome que me quieres,
ya nada lo sé,
ni hasta si me vez,
pues te noto tan distante,
que mi energía no te llama,
pues no te siente como para alcanzarte.

En esta etapa el alcohol
no es suficiente para expresar mi malestar,
tú me dejas, te vas de aquí,
hasta por allá,
donde no te puedo mirar,
donde la poesía no se deja notar...

Mis versos son tan claros como el agua,
cual cada vez que tocas te mancha,
sin ser tan prescisa, tan exacta,
te mata...

Las palabras se las llevará el viento,
pero yo andaré metido quizas en el subsuelo,
antes de morir,
volveras a volar,
bonita libertad,
sin tanta opresión,
nunca mas
pues huiré de ti,
de tu percepción tan sutíl
y de las cosas que pude decir,
pero que solo por ti,
mi mente las iba a destruir...

Antes de que no llegue nada

Esta vez no se como empezar,
pero al final mi cuerpo se ha de matar,
por verte una vez mas,
toda luz
sin palabras yo!
sin acento tú...


Colores de mil formas,
tú me das muchas sesaciones,
agua
por estos días sales tan cara,
que ni la tierra te quiere,
que ni la arena te llama...
agua,
sales tan anonadada,
que no hay paz sin calma
que no hay conciencia sin ganas,
y tú sigues ahi tan clara.


Quiero ver tal como eres,
pues no seas ahora tan indiferente,
y no me digas que no amas,
siendo tú tan callada,
ahora no me des tu espalda,
pues habla,
aunque de mi no estes tan enamorada,
habla
que la verdad no te niega nada,
ni la rabia,
habla!
que se salen mil palabras y no poder ninguna de ellas
escucharlas,
sin ti yo no sería nada.


Pero que quieres de mi,
del destino que te puedo hacer concebir,
de las palabras que aprendes de mí,
de la silueta que ves defrente de mí,
que es lo que te puedo dar yo a ti?
si tú sabes la respuesta,
porque me lo vienes ahora a discutir.


Cambiate de alma,
que la veo tan desesperada
a todas las cicatrices que tengo en mi propia alma,
para buscar paz,
de la que nos de un poco de libertad,
y dejame vivir sin cruz,
para que aiga algo entre yo y tú,
y no nos quedemos sin luz...